El doblaje en español suele ser un tema polémico en redes sociales. Unos dicen que el doblaje en español latino, también conocido como español neutro, es muy artificial y, por lo tanto, insoportable. También están los que dicen que el doblaje en español de España solo lo entienden los españoles, y que, por ende, es inútil para unir a la mayoría del público de habla hispana; cosa que sí logra el español latino.
En este artículo les contaremos sobre la historia del doblaje en español y la realidad de la industria hoy en día.
Los inicios hispanoamericanos
El primer intento de doblaje al español se hizo con la película Río Rita (1929). Fue muy bien recibida en Sudamérica, pero muy mal en España. Esto se debe a que todos los actores de doblaje eran sudamericanos.
La primera película doblada al español fue Blanca Nieves y los siete enanitos (1937) y fue producida en México por la Metro Goldwyn Mayer (MGM). La primera película doblada en Argentina fue Dumbo (1937).
El doblaje en español latino tuvo éxito instantáneamente. Ya en 1944 y 1945, MGM contrató a actores mexicanos y argentinos y se los llevó a sus estudios en Nueva York para que doblaran películas. Varios de los mexicanos que se fueron Nueva York pertenecían a la famosa cadena de radio XEW.
El boom del doblaje latino llevó a los gobiernos argentinos y mexicanos a prohibir las películas dobladas porque representaban una competencia para las industrias nacionales, sobre todo para la mexicana que estaba viviendo su época de oro. No obstante, se permitió seguir doblando las películas de dibujos animados. A pesar de las prohibiciones, con el paso del tiempo la Ciudad de México se convertiría en la capital del doblaje en español neutro.
Los inconvenientes para grabar
Hay que resaltar que, en las primeras épocas del doblaje, había muchos inconvenientes. Los doblajes se realizaban de tal manera que si había un error se tenía que desechar toda la grabación. Los actores no grababan por separado, como hacen hoy en día, ya que solo había una banda de grabación. Todos grababan al mismo tiempo y si alguien se equivocaba había que tirar a la basura todo los que se había hecho.
Los inicios españoles
El primer doblaje al español de España fue realizado en 1931 para la película Entre la espada y la pared de Marion Gering. Este doblaje realizado en París fue todo un éxito, tanto así que se les extendió el contrato a los actores.
Entre 1933 y 1934 llegan los estudios de doblaje a España. El estudio más importante fue el de la Metro Goldwyn Mayer, ubicado en la ciudad de Barcelona. En comparación con otros estudios, como Fono España, Trilla-La Riva y Cinearte-Iberson, el estudio de MGM tenía mejor reputación ya que la calidad del sonido era la mejor.
Durante la Segunda Guerra Mundial, prácticamente no se importaron películas en Europa. Lo mismo sucedió durante los tres años de guerra civil española. Estos años fueron de gran perdida para Hollywood, pero la industria del doblaje ya era un negocio seguro. Así que cuando terminó la Segunda Guerra Mundial, Hollywood se abrió paso al género de cine bélico y pudo recuperar las pérdidas. De esta manera, la exportación de películas hechas en Estados Unidos seguiría siendo un asunto de gran importancia en los tratados de comercio.
Durante mucho tiempo, en España se escuchaban las películas en doblaje latino porque las condiciones laborales de los actores de doblaje, en España, eran precarias. La Sirenita, La Bella Durmiente y La Cenicienta son ejemplos de películas que tardaron muchos años en ser dobladas al español de España. Al mismo tiempo, en La historia del doblaje cinematográfico de Alejandro Ávila se reporta el frecuente uso del español neutro en el doblaje de series de televisión. Sin embargo, en la segunda mitad del siglo XX, la industria del doblaje en España adquirió poder y hoy en día tiene mucho éxito.
El franquismo y la industria cinematográfica
Hay gente que dice que el doblaje fue en España fue obra del régimen de Francisco Franco; dicha afirmación es falsa. Hay testimonios de una prohibición general de películas en cualquier lengua que no fuera el español, pero no queda registro de dicha prohibición en el archivo del Boletín Oficial del Estado. Durante la dictadura, sí se prohibieron oficialmente las películas en euskera y catalán.
Durante la guerra, en España se importaron y doblaron al español películas italianas y alemanas y, sobretodo, documentales de propaganda nazi y fascista. Por el otro lado, es cierto que el régimen franquista prohibió la importación de películas de países aliados durante la Segunda Guerra Mundial. No obstante, el franquismo permitió la importación y doblaje de películas de países aliados a los pocos años de que se acabara la guerra.
La actualidad
En la actualidad, tanto la industria española como la industria latinoamericana están bien establecidas. Sin embargo, la gigantesca industria de doblaje mexicano se ha visto perjudicada por la competencia en otros países hispanoamericanos que ofrecen un servicio de doblaje más barato. A su vez, las leyes anti-doblaje que intentan proteger la industria nacional del cine siguen perjudicando al doblaje.
Hoy en día, el trabajo del actor de doblaje es frenético. En la mayoría de los casos, el actor llega al estudio y actúa sin siquiera haber ensayado. Hay veces en las que los dobladores participan en la traducción de los textos originales. También hay productoras, como Pixar, que sí se comunican con el actor de doblaje con antelación y le permiten ensayar el papel.
Opiniones
A menudo he oído a españoles decir que no se pueden tomar en serio el doblaje latino con expresiones como «Qué alegre que hayas venido». También he escuchado a muchos turistas latinoamericanos quejarse de que son pocos los cines en España que ofrecen la opción de ver la película en voz original y que muchas veces les cuesta entender el vocabulario del doblaje en español de España.
Si tuviera que hacer una apología del doblaje latino, dijera que, a pesar de ser artificial, logra unir el humor de un continente de casi 500 millones de personas. Si tuviera que defender al doblaje en español de España, diría que este logra traducir de manera más natural y acorde a las expresiones coloquiales de la Península Ibérica.
Conclusión
A fin de cuentas, la gente se acostumbra a la voz de los dobladores, tanto así que varios se han llegado a hacer bastante famosos como Tata Arvizu (México), Constantino Romero (España), Humberto Vélez (México), Nuria Mediavilla (España) y Cristina Hernández (México).
Sin importar el tipo de doblaje, me parece que el Estado no debería ni subvencionar a la industria del doblaje, ni ponerle prohibiciones. El doblaje subsiste por la demanda. Siempre habrá gente que no podrá aprender una segunda lengua y que necesitará del doblaje para ver películas.
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Entrevista a Fernando Castillo: La traducción audiovisual, retos y oportunidades
Bibliografía
- Macchi, F. (2015, 3 agosto). El mundo del doblaje. El Observador. https://www.elobservador.com.uy/nota/el-mundo-del-doblaje-201582500
- Gonzáles-López, P. (1997). Historia del doblaje cinematográfico. Universidad de Málaga. http://www.trans.uma.es/pdf/Trans_2/t2_179-212_Resenas.pdf
- Agramunt Oliver, V. (2016). Una historia del doblaje. Universidad de Mayores de Experiencia Recíproca. Madrid. https://umer.es/wp-content/uploads/2016/02/UMER-94_web.pdf
- Saavedra, T. A. (2020, 20 octubre). Historia del doblaje en México. México Desconocido. https://www.mexicodesconocido.com.mx/doblaje-mexico.html