El lenguaje y la discapacidad
¿Qué es una discapacidad?
Antes de abordar el tema del lenguaje y cómo este debe utilizarse en relación a las personas con discapacidad, es necesario comprender qué significa esto verdaderamente.
De acuerdo con la Organización Panamericana de la Salud (OPS) las personas con discapacidad son: “Aquellas que tienen deficiencias físicas, mentales, intelectuales o sensoriales a largo plazo que, en interacción con diversas barreras, pueden obstaculizar su participación plena y efectiva en la sociedad en igualdad de condiciones con los demás.”
Breve historia de la discapacidad
Hasta el siglo XVIII las personas con discapacidad vivían en completa exclusión de la sociedad. En su mayoría, estaban condenados a estar confinados en sus hogares, ocultos del ojo público. En ocasiones incluso, se escondía el hecho mismo de su existencia de personas externas al núcleo familiar. Fue una época de completa desvalorización y menosprecio de la persona con discapacidad.
Una vez adentrado en el siglo XIX, se pasó a la etapa que se conoce como institucionalización. Si bien salían de sus casas, no era para nada más que ser institucionalizados en algún centro. El problema principal de estos centros es que en muchas ocasiones, por más de que cuidaban a los pacientes, no se les daba el trato individualizado y por ende adecuado que requerían. Trataban a todas las personas con discapacidad del mismo modo, ya fueran personas con parálisis cerebral, síndrome de Down o esquizofrenia. Esto inevitablemente lleva a un tratamiento erróneo del paciente y dificultaba su correcto desarrollo. Aún así, en esta época surgen personajes de gran importancia como el doctor francés Jean-Étienne Esquirol, quien establece un centro para personas con enfermedades mentales y se dedica a estudiarlos con el propósito de encontrar la etología de su situación y una eventual cura. Su centro fue un éxito en el París de la época.
Ya a mediados del siglo XX, se pasa a la época de la desinstitucionalización. Los avances científicos unidos a los avances en materia legal, cimentan las bases para una sociedad menos segregatoria. Un evento de gran importancia es la Declaración Universal de los Derechos Humanos, firmada el 10 de diciembre de 1948 en París. Este establece en sus 30 artículos los derechos humanos innegociables que serán adoptados por una gran cantidad de países con el paso del tiempo.
Finalmente, en el actual siglo XXI, se puede hablar de un período de inclusión. Si bien hay muchísimo camino por recorrer, es innegable que existe una preocupación o conciencia social acerca de no solo la comprensión y ayuda a las personas con discapacidad, sino de su inclusión. Es decir, se busca que cada persona pueda formar parte de la sociedad sin importar las discapacidades que tenga. Esto obviamente implica la no-segregación, pero también el fomento de la accesibilidad, uso del lenguaje correcto y general comprensión acerca de lo que implica vivir con una discapacidad.
¿Cómo hacer alusión a una persona con discapacidad?
Si bien muchos no buscamos ser ofensivos, en ocasiones -ya sea por cultura o por ignorancia- caemos en el uso de términos que resultan despectivos. Como regla básica, solo debe mencionarse una discapacidad cuando es esencial a la conversación. Las personas con discapacidad tienen nombres como cualquier otra persona. En vez de decir: «la niña ciega”, puede decirse “María”. Aunque a algunos les tome por sorpresa, los nombres son igual de útiles para hacer referencia a las personas con discapacidad como para las personas sin discapacidad.
Ahora, hay situaciones en las que se debe hacer mención a la discapacidad de una persona; no es pecado ni delito. La discapacidad que una persona tiene es real, y el ignorarlo es perjudicial para ella. En estos casos, lo más sencillo es llamar las cosas por su nombre: persona con discapacidad. Y es que es esa la clave, persona. No es lo mismo decir eso, que decir discapacitado. Si bien puede parecer una diferencia menor, cuando a una persona con discapacidad se le despoja de esa cualidad de persona, aunque sea solo nominalmente, se le está reduciendo a su discapacidad.
Las personas somos un complejo cúmulo de cualidades, y el utilizar las limitaciones como único diferenciador, inevitablemente ignora todas las habilidades que se poseen. Así como de otros no se dice: “el que cocina fatal”, o “la que es pésima con los números”, a las personas con discapacidad no se les debe llamar discapacitados bajo ningún contexto.
En síntesis, si consideras prudente hacer alusión a la discapacidad de una persona, el término apropiado es persona con discapacidad.
Terminología concreta y correcta
Como ya explicamos, el término persona con discapacidad es el correcto, sin embargo ¿Qué hacer cuando necesitamos hacer referencia a la discapacidad concreta de una persona? Por suerte, el lenguaje es un elemento maravilloso, y una de sus cualidades es su capacidad de adaptación a la necesidad de las personas. Por ello, existe un término correcto para todo. A continuación, presentamos una pequeña lista de qué vocabulario emplear según la discapacidad. Este fue publicado por la Sección de Participación- Género e Inclusión del Gobierno de Chile.
Visual: persona ciega, persona con discapacidad visual, persona con baja visión, persona con deficiencia visual.
Motora: persona que usa silla de ruedas, persona con discapacidad física, persona con movilidad reducida.
Auditiva: persona con discapacidad auditiva, persona sorda. (Importante: no todas las personas con discapacidad auditiva son mudas)
Mental: persona con discapacidad psiquiátrica.
Intelectual: persona con discapacidad intelectual.
Medios de comunicación
Los medios de comunicación juegan un rol clave en el uso apropiado del lenguaje. Tanto en relación a las personas con discapacidad, como en cualquier otro ámbito. Los comunicadores tienen la oportunidad de ser agentes de cambio, y por ello tienen una gran responsabilidad. Saber cómo abordar una discapacidad, incluso en el lenguaje, cuando no se tiene una es un gran reto. Sin embargo, con la ayuda de esta comunidad y con una actitud dócil puede mejorarse el uso del lenguaje.
Con ese propósito, quisimos reunir una serie de preguntas que el comunicador, o cualquier persona, puede hacerse a sí mismo para reflexionar acerca de si está utilizando el lenguaje adecuadamente o no. Esta serie de preguntas fueron redactadas por el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI).
- ¿Se aborda al grupo social de la discapacidad o se les trata como sujetos o más bien como objetos?
- ¿Qué valores se transmiten sobre el grupo? (ver uso de verbos y adjetivos)
- ¿Caen en el error de transmitir una imagen amalgamada en la que parezca que todas las discapacidades son iguales?
- ¿Se promueve una visión caritativa/paternalista o por el contrario de ciudadanía, donde las personas con discapacidad participan en todos los ámbitos de la sociedad como cualquier otro ciudadano?
- Si describen barreras, ¿las vinculan a la discapacidad o a la sociedad?
- ¿Hacen juicios de valor sobre la forma en que la discapacidad ha de ser vivida?
- Si el profesional de la comunicación tuviera una discapacidad, ¿se sentiría cómodo/a con la imagen transmitida?
- ¿Están creando barreras a la inclusión?
Por concluir, queremos recalcar que no hay dos discapacidades iguales, y que no todas las discapacidades son visibles.
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Bibliografía
CERMI Estatal. (29 de abril de 2011). Decálogo para un uso apropiado de la imagen social de las personas con discapacidad. Recuperado de https://www.cermi.es/sites/default/files/docs/colecciones/Dec_logo_para_uso_IMAGEN_SOCIAL.Folleto.pdf
Fundación Once. (27 de enero de 2020). Por Un Mejor trato a las personas con Discapacidad. Discapnet. Recuperado de https://www.discapnet.es/areas-tematicas/nuestros-derechos/tus-derechos-fondo/discapacidad-versus-minusvalia
OPS/OMS | Organización Panamericana de la Salud. (2022). Discapacidad. Recuperado de https://www.paho.org/es/temas/discapacidad
Sección de Participación- Género e Inclusión. Uso de Lenguaje Inclusivo . Gobierno de Chile. Recuperado de https://www.cultura.gob.cl/wp-content/uploads/2017/01/guia-recomendaciones-lenguaje-inclusivo-discapacidad.pdf
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Excelente y necesario artículo. Explica con claridad algunos abordajes que se han hecho a través del tiempo acerca de las personas con discapacidad. Utilizar lenguaje apropiado para referirse a las personas que tienen alguna condición de discapacidad es relevante para reconocer su dignidad y posición social, que es igual que la de todo ser humano. Una condición física o psicológica no hace mejor o peor a un ser humano. Gracias por escribir tan acertadamente sobre este tema, con datos fundamentados y una redacción limpia. Felicitaciones.
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En efecto, el lenguaje nunca es gratuito, siempre lleva una carga conciente o inconsciente de intencionlidad, de historia y cultura. Los cambios estucturales a largo plazo no se hacen en un día, primero se empeiza a gestar el cambio en las formas cotidianas, entre ellas el lenguaje es fundamental porque es una herramienta diaria de comunicación mediante la cual se traduce la concepción del mundo que tiene el hablante. Así, para procurar un cambio real a largo plazo en el tema de cómo abordar el tema de la persona con discapacidad es esencial empezar con los cambios a nivel de la estructura y forma del lenguaje que se utiliza para esta realidad. El lenguaje, como bien lo expresa el filósifo Alfonso López Quintás, es creador de ámbitos de realidad, tiene el poder de configurar para bien o para mal las relaciones y la comprensión que se tiene del mundo. De ahí la importancia de usarlo con responsabilidad y de acuerdo con la realidad a la que hace referencia. Gracias Maris por abodar este tema en el cual hay mucho camino por recorrer, por ofrecernos alternativas de frases bien usadas para ir cambiando el lenguaje a la hora de tratar a las personas con discapacidad. Saludos.
Excelente artículo! Que bien podríamos todos hacer cuando aprendemos a llamar a una persona con discapacidad correctamente. Normalmente los errores pueden ser sin intención de hacer daño, pero le hacemos daño a la sociedad en general. A vencer la ignorancia con artículos de buena calidad como este!