Redacción con “R” de Ramadán

Maris Stella Fernandez Barquero

hace 2 años

Las personas pertenecientes a la religión islámica tienen un calendario aparte del gregoriano que usan, entre otras cosas, para enmarcar las festividades religiosas. El noveno mes de su calendario es el de Ramadán, considerado como el más sacro.

Se trata de una festividad con inicios astronómicos, razón por la cual el inicio lo indica la luna creciente. Quienes dictan cuándo sucede esto son los miembros de un comité especializado en avistamientos lunares de Arabia Saudí.

¿Qué tiene de especial?

De un modo similar en el que los fieles cristianos creen que la Navidad dicta el día del nacimiento de Jesucristo, en el islamismo se cree que en el año 610 el ángel Gabriel se le apareció al gran profeta Mahoma, y mediante una revelación le indicó lo que debería decir el Corán. Esa importante noche es conocida como “Laylat Al Qadar”, lo cual podría traducirse como “La Noche del Poder”. Se cree que esta noche ocurrió durante el mes de ramadán.

Además, la tradición cuenta que el mes de ramadán es uno de “gracias especiales”, por lo que aquello que se le pida a Alá con verdadera devoción tiene mucha más probabilidad de ser cumplido durante este mes que en otro momento del año.

¿Cómo se celebra?

Como se podrán imaginar los lectores, el día en el que es revelado el texto más importante e influyente de tu vida, que además procede directamente de la boca de Dios, es un día que quieres celebrar.

Con esta alegría en mente, los musulmanes casa año durante el mes de ramadán deciden hacer grandes banquetes, aunque antes de hacer el banquete tienen un gran ayuno. Este ayuno, junto a otras normas, funcionan como normas de piedad para ayudar a vivir apropiadamente este periodo sacro.

Han de ayunar todas las personas musulmanas desde la salida hasta la puesta del sol. De esta norma, están exentas las embarazadas, los niños hasta la pubertad, las personas enfermas, los adultos mayores, quienes estén de viaje e incluso las mujeres que estén en su periodo. Si la razón por la cual quedan exentos del ayuno es algo temporal, como lo puede ser la menstruación, deben recuperar las horas en algún momento del año.

Cabe recalcar que este ayuno no es solo de comida y bebida, sino también de relaciones sexuales. Además, por ser una época tan importante se les insta a abstenerse de cotilleos, peleas y discusiones, no durante el día, sino todo el mes.

Algunos datos de redacción

Al ser un periodo festivo, es común dar las felicitaciones del caso a quienes lo viven. Para que puedas hacerlo en toda regla, te dejamos unas claves de redacción brindadas por la Fundéu.

Si vas a escribir “ramadán», se debe hacer con minúscula o mayúscula dependiendo de exactamente a qué hagas referencia. Si hablas del noveno mes del año, es con minúscula, pero si hablas de Ramadán como evento religioso, va con mayúscula.
La fiesta en la que celebran el fin de Ramadán, y por ende el fin del ayuno es conocida ¿: “Aíd al Fitr” o Fiesta del Fin de Ayuno. Ambos modos de escribirlo, deben llevar mayúscula en cada palabra.
Islámico e islamista no son sinónimos: el primero se refiere a todo aquello referente a la religión islam, mientras que el segundo se refiere a quienes vinculan el islam a la vida política. Por ejemplo, de un partido político podría decirse que es islamista.

Otros detalles

Ramadán probablemente suene difícil, pero el pueblo islámico se caracteriza por tener una gran piedad y, como en muchos casos, su cultura e incluso sistema político están intrínsecamente vinculados con su religión, ello facilita mucho más las cosas.

Por ejemplo, en la mayoría de los países donde el islam es la religión predominante, se acortan los horarios de jornada laboral y educativa, ya que al comer solo unas pocas horas al día las personas están con menos energía.

Aunque la oración es uno de los pilares fundamentales del islamismo en cualquier momento del año, es lógico que en Ramadán esto cobre especial relevancia. Los musulmanes están llamados a orar, o hacer el “Salat” cinco veces al día:

Fajr/Subh: al amanecer.
Duhur: al medio día.
Asr: cuando esa sol está a la mitad entre el medio día y la puesta.
Maghrib: en la puesta del sol.
Isha: cuando anochece.

Para hacer estas oraciones deben seguir algunas indicaciones. Por ejemplo, deben hacerlo orientados hacia La Meca como si fuera un punto cardinal. También, deben hacer cierta limpieza variando en profundidad según el nivel de impureza, tanto física como espiritual. Los musulmanes tienen la obligación de hacer estas cinco oraciones con excepción de los niños y los que hayan perdido la cordura.

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